martes, 30 de noviembre de 2010

Juegos de confusión

Hay distintos juegos de confusión.

Los hay para evitar que la gente sepa algo de ti.

Los hay para reírse de otros.

Los hay para preparar sorpresas.

Los hay para esconder secretos de Estado.

Los hay para preparar una acción publicitaria o propagandística.

Los hay para esconder sentimientos.

Y los hay como los tuyos y los míos: directos... pero sin terminar de decir lo que nos tenemos que decir.

No sé si es que nos hemos acostumbrado, que sólo nos estamos rondando, que esto es sólamente una amistad profunda o es que de verdad hay algo más.

Y es que nuestros mensajes, aunque parezcan evidentes y sin muchos rodeos, cuando tratan de estas cosas no crean más que confusión.

Y lo peor es que aún sigo enganchado a este juego...

domingo, 21 de noviembre de 2010

El límite de la apuesta

No es cuestión de cubrir postura cuando apuestas.

Si lo haces no tiene nada de gracia el juego.

Y posiblemente termines perdiéndolo todo.

Pero hay que ser prudente y tampoco puede uno apostar a lo loco.

Puesto que jugárselo todo a Cara o Cruz no tiene sentido si quieres disfrutar de la velada.

Y darle a las cartas tampoco es que sirva de mucho.

El caso es que la incertidumbre sigue presente, aunque la mesa sea menos hostil que en anteriores ocasiones.

Y es cuestión de saber si sigues echando fichas o te retiras dignamente para casa.

Sobre todo cuando tienes aún montante que guardar en el esmóquin y no te lo has pulido todo en una apuesta que, de continuar sin resolverse, no tendría límite.

El buen jugador sabe nadar y guardar la ropa, aparte de confiar en que la intuición le indique si aún quedan jugadas ganadoras en las mesas del casino... y si merecen de verdad la pena los resultados que obtenga de ellas.

martes, 9 de noviembre de 2010

Vigilia...

No sé qué pasará mañana.

Estoy en vigilia, como un guerrero de la luz de Paulo Coelho, antes de la batalla.

Y mis espías están confundidos.

Parece ser que todavía queda esperar...

Como bien dice Sun Tzu: "El que está bien preparado y descansa a la espera de un enemigo que no esté bien preparado, saldrá victorioso".

Pero el caso es que no sé qué es lo que quieres.

Me confundes. Tus ojos dicen una cosa, tu risa la misma que yo creo...

...pero tu cuerpo está frío, distante, temeroso...

...y no sé cuánto tiempo podré mantener a la caballería a la espera, puesto que sus corceles están nerviosos.

...y no sé cuánto tiempo tengo que estar ahí avanzando poco a poco sin saber siquiera si estás ahí.

...y, la verdad, con días como hoy, dan ganas de retirarse del terreno de batalla.

Porque no sé si estoy perdiendo un tiempo que, para mí, es precioso.

No tengo claro que esta sea la batalla adecuada para satisfacer mis intereses y anhelos.

Sólo me impide hacerlo saber que en tus filas se guarda un tesoro que brilla como una estrella.

Y el deseo de compartirlo contigo y multiplicar su brillo para admiración del mundo entero.

viernes, 22 de octubre de 2010

Pequeños y mayores

No me tratéis como un niño pequeño.

Sé que me queréis, que me habéis conocido frágil y que queréis evitarme mal alguno.

Pero no estoy en ese momento.

No he querido contároslo, porque sé que no me creeríais, he intentado demostrároslo.

Pero no lo véis. No os fiáis de mí.

Lógico, si me seguís viendo como un niño pequeño.

Pero preguntaros por qué me juzgáis con el prisma de vuestras experiencias, porque mi situación se parece a la vuestra, pero es que no es la misma.

Ya aprendí a sufrir. Ya aprendí a desprenderme. Ya aprendí que la vida es cuestión de caerse y levantarse.

Ya sé lo que es estar muerto en vida de verdad. Ya sé lo que es querer demostraros que sabía caminar.

Pero hoy, resucitado y desprendido, no os tengo que demostrar nada. Sólo hacer.

Y me resulta entre gracioso e indignante ver cómo vosotros sí que podéis hacer lo que a mí se me critica tanto.

Y lo entiendo. Os agradezco el cariño.

Pero ya no es el momento de oir ese mensaje. Porque cuando lo transmitís constantemente provocáis que se reafirme esa profecía. Si os escuchara caería otra vez en la Red de la muerte en vída.

Me enviáis energía negativa para protegerme, sí, lo entiendo. Pero no estoy en vuestro momento, estoy en el mío.

Veo alrededor cómo otras personas buscan la aprobación de personas que las limitan. Yo no quiero lo mismo, aunque así actué años atrás.

Vosotros me dáis, pero no consiento que me quitéis. No me tratéis como un niño pequeño, que ya sé extraer yo vuestras enseñanzas.

No me enfadéis más de lo que estoy. Porque os quiero, porque quiero.

Porque yo también tengo que aprender a darme mis propios golpes.

Por que la vida ha de vivirse sin límites, sin gente que te limite, y con valentía.

¿Sabéis qué siento? Que no creéis en mí ni sabéis quién soy.

Me véis como un niño pequeño... y yo lo único que puedo hacer es tener paciencia, pero hay días que se agota. ¿Sabéis por qué? Porque en casa de herrero, cuchillo de palo.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Constelación

Yo no brillo como las estrellas.

Mi luz es más tenue.

Es el brillo del gas estelar que las alimenta.

Esa es mi esencia.

Alimentar estrellas.

Y un día algunas brillarán con matices tan hermosos que un astrónomo las descubrirá.

Y otro, con el tiempo, se preguntará qué es aquello que las rodea.

Y contará que existo.

Mientras sigo alimentando con mi ser las cosas más bellas que hay en el Universo.

martes, 12 de octubre de 2010

La esencia de la magia

La esencia de la magia es etérea.

Por mucho que te digan no se puede crear.

Ésta viene a ti, en momentos pequeños, por sorpresa.

De repente te ves envuelto en un hechizo y no sabes por qué.

Lo notas.

Pero no todo el mundo puede conservar la esencia de la magia.

No todos pueden aceptar regalos de ese tipo.

Muchos ni siquiera creen en esos momentos mágicos.

Y los rechazan.

Pero lo que no se dan cuenta es que cuando un hechizo te elige, uno debe saber aprovecharlo.

Porque si no lo haces, si lo ignoras, si le tienes miedo, si no lo aceptas... éste terminará explotando en tus manos.

Y si lo hace, aunque no seas consciente de ello, te dejará mellas en el alma que no sabrás detectar hasta que veas cómo otra persona sí aprovecha un hechizo similar.

Al corazón de tus complejos

Clava un puñal al corazón de tus
complejos,
mata ese demonio,
libérate.

Desclava las garras venenosas del dragón del miedo de
tu piel y salta.
Desnúdate ante la vida.
Huye de gente que juró que no podrías.

Clava una estaca a la ansiedad,
aprende a vivir solo,
a no postergar los días por las dudas,
no temas que te amen.

Toma la llave de la puerta,
sé completo,
no te rompas por la culpa,
rasga las vestiduras que limitan tu piel.
Sal de ahí.
Mézclate con todo.


De José Ignacio Hurtado García. El Yugo de los mansos

Es mi primo, el poeta. Qué bueno es el jodío.

http://elblogdejoseignaciohurtado.blogspot.com

viernes, 8 de octubre de 2010

El camino / The Path

Primero es imaginar.

Después hay que ponerlo sobre el papel o el lienzo.

En ese momento estás creando.

Al terminar, tienes que saber presentarlo bien.

La recepción de tu obra o tu proyecto te marcará el camino del éxito.

Tan sencillo y difícil como ésto.

/

The first step is imagination.

Then you must put in the idea over paper or a canvas.

In just that moment you're creating.

At finishing, you will know how launch it as best as you can.

The reception of your work or project shows you the path of success.

So easy and complicated like this.

lunes, 4 de octubre de 2010

'Energeia'

Energía.

¿Dónde te transmito?

¿En qué te uso?

¿Cómo te controlo?

¿Puedo evitar que te extingas?

Estoy como una estación generadora andante.

Necesito compartirla, disiparla en alguien.

Transmito, lo sé. Hace pocos días que me lo confirmaron.

Y me lo agradecieron.

Hay fuerza, potencia e intensidad.

Incluso hay motivos para producir y transmitir esa energía.

¿Pero la estoy dirigiendo a la línea adecuada?

domingo, 3 de octubre de 2010

Renunciar a lo adecuado

En cualquier actividad, es preciso saber lo que se debe esperar, los medios de alcanzar el objetivo, y la capacidad que tenemos para la tarea propuesta.

"Sólo puede decir que renunció a los frutos aquel que, estando así equipado, no siente ningún deseo por los resultados de la conquista y permanece absorbido en el combate".

"Se puede renunciar al fruto, pero esta renuncia no significa indiferencia ante el resultado".

El guerrero de la luz escucha con respeto a la estrategia de Ghandi. Y no se deja confundir por personas que, incapaces de llegar a ningún resultado, viven predicando la renuncia.


De Paulo Coelho. Manual del guerrero de la luz

sábado, 2 de octubre de 2010

El deseo

Tengo un deseo.

Tiene varias caras.

Mis deseos son poliédricos, como yo.

Por un lado está el de la consecución, que sólo implica el comienzo de un camino.

Por otro, el de la realidad, que significa no perder el tiempo en él.

Más allá, el del disfrute de pensar en él y que continúe. Éste supone ilusión y a la vez esfuerzo por mantenerlo.

En muchos momentos el de la ensoñación, que te da fuerza y energía sólo de pensarlo.

Y, no por último porque todavía no ha mostrado más facetas, el de la razón. Éste es el incompatible con la irracionalidad sentimental del mismo.

Ese es el que hace que cambie constantemente de cara y haga de él una aventura.

viernes, 1 de octubre de 2010

Cocina digital

Hierven las ideas, bullen los proyectos.

Con el concurso de un chef tekkie se pueden preparar alimentos digitales realmente sabrosos.

Aunque sean de unos y ceros.

A mí, por lo menos, me alimentan.

No me extraña que haya perdido el apetito y el sueño ;-)

Seis y media de la mañana... ¿Dónde se funden?

Son las seis y media de la mañana.

Estaba despierto en la cama con la mano en mi sexo, pensando en ti.

En como conquistarte.

Y de repente me sentí con fuerzas y pensé:

en cual era la diferencia entre ser valiente,

decidido,

o temerario.

De cuánto de cada cosa voy a tener que ser para conseguir mi objetivo.

De cual es la fórmula alquímica para que yo satisfaga mi deseo.

De cuanto ingrediente de cada necesito para contrarrestar tu hechizo.

En cómo y dónde se funden y en cual es la proporción adecuada para aventurarme en las Montañas de la Locura.

Y he tenido la imperiosa necesidad de levantarme de la cama para escribir la fórmula.

Me desvelas.

Y cómo me gusta que eso ocurra.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Estroboscópico

Destelleo.

No me digas cómo, pero estoy a destellos.

Como una luz estroboscópica.

Con la intensidad suficiente para no apagarme en una temporada.

Con la potencia suficiente para que me vean desde lejos.

Y eso que parecía que llevaban más de dos años mis baterías agotadas...

martes, 28 de septiembre de 2010

Cuando tecleas letras como si fuera música

Fuiste un juntaletras, un escritor de noticias.

Fuiste el perfecto rellenador de columnas.

Y cuando lo dejaste, odiabas escribir.

Pero tras varios años de quejas y cobardías, en el momento en que cogiste tu vida, por azares del destino, se encendió una luz en tu pecho que se extendió por todo el cuerpo. Esa llama aprovechó el combustible que habías acumulado y lo fue quemando lentamente. Cuando te diste cuenta que era de forma distinta a las llamaradas que consumían toda la energía en estallidos incontrolables.

Cuando las cosas se calmaron.

Cuando saliste del desastre.

Cuando volviste de la muerte en vida.

Resultó que tus dedos tocaban música en el teclado.

Nada más y nada menos, que un día la oíste.

Oíste música en tu teclado.

Y te diste cuenta que estabas escribiendo otras cosas que no eran noticias.

lunes, 13 de septiembre de 2010

¿Ángel o nigromante?

Estaba muerto. Yo estaba muerto. Era un muerto en vida.

Sé qué me mató. Sé qué me mantuvo entre el infierno y el limbo.

Pero no viene al caso.

Estaba muerto. Pero hoy hay un hálito de vida en mi interior que procede de una magia extraña.

Una magia sorprendente. Una fuerza desconocida. Una ansiedad incontrolable que crece sola y reactiva todo mi ser.

Y da miedo.

Y da placer.

Mucho placer.

Engancha. No quiero que me lo quiten. No quiero volver a la oscuridad.

Pero no se regresa del infierno sin cicatrices. Y sin contrapartida.

Esto es magia de nigromante, porque ha dado vida a un muerto viviente como yo. ¿O ha sido un ángel?

¿Y qué querrá de mí? Esa es la gran pregunta.

Algo está ocurriendo (something happens).

Algo sobrenatural.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Desbordante

Ahora lo entiendo. Me desbordo.

Por eso soy como soy.

Ya lo sabía, necesito actividad, mucha actividad. Pero me escudo en la pereza para evitarme.

Y en la procrastrinación. Vaya palabro.

Necesito crear, no es más. Siempre he sido así. Necesito estar activo. Si paro, muero.

Pero eso sí, lo que no necesito es hacerlo sin control y para mostrar compulsivamente "lo bueno que soy"; y que por ello me admiren, como he hecho hasta ahora.

Soy virgo ascendente virgo. Sólo leer la configuración de ese signo asusta: Hefesto en estado puro.

Pero él manejaba el fuego del volcán como nadie para forjar las armas más precisas y moldear las joyas más preciosas.

Y su esposa era Afrodita, la diosa del amor; no lo olvidemos.

Algo tendría...

Ciencia

Los recuerdos se construyen a base de olvido. Olvidar todas las manos para recordar las tuyas, todos los ojos para recordar mi reflejo en los tuyos, todas las palabras para sobrevivir sólo con las tuyas. Los recuerdos se construyen a base de olvido. No es lírica, se aprende con el estudio de la memoria. Algún día estudiaré cardiología. Por si se ven las cicatrices.

Hermosa composición de Eria.

Lee su blog y disfrutarás de cómo se bordan las palabras con inteligencia y delicadeza: ¿Qué más quieres de mi?

sábado, 11 de septiembre de 2010

Pajarillos

Hay pájaros de todo tipo:

La alondra que no sabes dónde va.

El águila, que es certera en su decisión.

La paloma, que gorjea sin más motivo.

El ruiseñor, que trina con el amanecer.

Los que observas con prismáticos.

Los que tienes en la mano.

Y los que están heridos.

El caso es que cuando tienes uno al alcance debes saber que al cogerlo hay que tratarlo como una espada, sostenerlo con decisión pero con sutileza. Si aprietas mucho, lo más probable es que provoques heridas; pero si no lo sujetas de la forma adecuada, lo perderás.

Aunque también depende de cuál escojas, claro.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Montañas del pasado

Cuánto me cuesta no olvidar a veces mis errores, cuánto me lastran esas situaciones, cuánto tiendo a pensar que he perdido, cuánto recuerdo lo que gané y perdí y cuánta culpa me echo por ello. Eso no sirve de nada más que para entristecerme y frenarme. Sólo quiero pensar que más allá de las "Montañas de la locura" hay luz, alegría, otros mundos y otras maneras de madurar la vida. Sólo quiero avanzar. Sólo quiero la paz del poder ser yo mismo sin pensar en que voy a perder a los que quiero. Sólo quiero poder decir lo que siento. Sólo quiero disfrutar con la gente que aprecio sin que piensen negativamente de mí. Sólo quiero ser yo y que por serlo me quieran.

Pero la montaña soy yo.

Dinamita, por favor.

4, 8, 15, 16, 23 y 42

O sea: estoy perdido...

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Perfección

Vivía buscando lo perfecto. Cuanto más se empeñaba en llegar a ella, menos puras le parecían las cosas que hacía. Más insatisfacción conseguía. Más desesperación tenía.

Soñaba con la admiración de los demás. Pero no se daba cuenta de que sólo conseguía el desprecio. Y cada vez iba haciendo menos y pedía más reconocimiento por lo que había hecho hace años, ya que era incapaz de alcanzar la excelencia. Nada estaba bien hecho. Hasta que se abandonó porque no encontraba nada que le hiciera sentirse satisfecho ni le llenara ni siquiera un poquito.

Y seguía pensando en que la gente tenía que respetarle.

Y continuaba queriendo recibir admiración.

Y encima se quejaba de no recibir las loas a las que creía tener derecho.

Lo había logrado: había conseguido ser un perfecto gilipollas.